La búsqueda permanente de una mejor calidad de vida
“La Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT: Intensity modulated radiation therapy) es una forma avanzada de Radioterapia 3D más precisa, en la que se modula o controla la intensidad del haz de radiación, obteniendo alta dosis de radiación en el tumor y minimizando la dosis en los tejidos sanos.”
Hace ya más de un siglo que la Terapia Radiante (RT) se utiliza como tratamiento de la patología oncológica. El primer informe de curación a través de radiaciones data de 1899, poco después que Guillermo Conrado Roentgen en 1985, descubriera los Rayos X. Desde ese momento, la Radioterapia, al igual que el resto de las técnicas utilizadas para tratar el cáncer, ha mejorado en forma constante.
La Radioterapia ha evolucionado de acuerdo a los avances científicos de la Oncología, de la física, de las imágenes y de los sistemas informáticos, mejorando tanto los equipos como la precisión, calidad e indicación de los tratamientos. Actualmente es junto con la cirugía y la quimioterapia, uno de los tres pilares del tratamiento del cáncer. Se estima que más del 60% de los pacientes con enfermedades oncológicas necesitarán tratamiento radiante en algún momento de la evolución de su enfermedad.
A diferencia de la quimioterapia, la radioterapia es un tratamiento localizado, por lo tanto los efectos secundarios están relacionados con la zona del cuerpo que se exponga a la radiación. Por ejemplo, si irradiamos la mama, los efectos secundarios fundamentales serán a nivel de la piel, la llamada dermatitis, (enrojecimiento e inflamación de la piel), La Radioterapia no provoca alopecía (caída del cabello), excepto que el área a tratar sea la cabeza.
Otro ejemplo importante de sintomatología que pueden presentar los pacientes es cuando se irradia la próstata, son frecuentes los síntomas urinarios (ardor al orinar o micciones mas seguidas) y rectales (irritación o aumento del número de deposiciones diarias).
Cuando el área a tratar involucra parte del estómago o intestino, estos órganos pueden sufrir irritación y generar nauseas o diarrea.
Como observaran, dije “pueden”, es decir que no todos los pacientes experimentan los mismos síntomas.
En general, la Radioterapia puede provocar astenia leve o moderada (cansancio generalizado), pero que no impide que el paciente cumpla con sus tareas diarias, simplemente, se va a sentir un poco más débil.
De acuerdo a lo mencionado previamente y en referencia a la tecnología usada en Radioterapia, la misma fue cambiando, desde las antiguas bombas de Cesio, luego Cobalto, hasta los mas modernos aceleradores lineales, que trabajan con Rayos X de alta energía, como el Trilogy.
Haciendo un poco de historia, hasta la década de 1980, la planificación de la radioterapia se realizaba con radiografías simples y verificaciones 2D o en dos dimensiones. El radioterapeuta no tenía una idea certera de la localización exacta del tumor.
A partir de 1980, con la radioterapia conformada en tres dimensiones (3D), gracias a la integración de la tomografía computada a la planificación y a los sistemas informáticos de cálculo dosimétrico, se obtienen imágenes virtuales de los volúmenes a tratar, que permiten dirigir y concentrar mejor la dosis y proteger con mayor exactitud los tejidos sanos adyacentes al tumor o área a tratar.
A partir de la década de 1990, otras técnicas de imágenes como la Resonancia Magnética Nuclear (RMN) y la Tomografía por emisión de positrones (PET), se han incorporado a la planificación de la radioterapia, con el fin de obtener una delimitación más exacta del volumen tumoral para respetar a los tejidos sanos cercanos.
La Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT: Intensity modulated radiation therapy) es una forma avanzada de Radioterapia 3D más precisa, en la que se modula o controla la intensidad del haz de radiación, obteniendo alta dosis de radiación en el tumor y minimizando la dosis en los tejidos sanos. Para ello utiliza modernos aceleradores lineales con colimador multiláminas y sofisticados sistemas informáticos de planificación dosimétrica y verificación de dosis.
En la actualidad, contamos con sistemas de verificación que nos permite chequear y ajustar diariamente la planificación del área a tratar, teniendo en cuenta no sólo las imágenes sino también los movimientos fisiológicos de los órganos, como por ejemplo el de los pulmones durante la respiración. A este tipo de Radioterapia se la denomina 4D y los tratamientos a realizar son la Radioterapia guiada por imágenes (IGRT: Image-guided Radiotherapy) y la Radiocirugia Estereotáctica Extracraneal (SBRT Stereotactic body Radiotherapy).
En conclusión, con el paso del tiempo el paradigma antiguo del tratamiento radiante ha cambiado radicalmente, hoy la intención no es sólo curar el cáncer a cualquier costo, sino evaluar constantemente el riesgo-beneficio y así buscar las máximas posibilidades de curación o control de la enfermedad, con el menor riesgo o costo físico para el paciente. Este cambio ha influido sin duda en la calidad de vida de nuestros pacientes oncológicos.
Hoy no sólo queremos que vivan más sino que vivan bien, lo más plenamente posible durante y con posterioridad al tratamiento.
Debe ser nuestro compromiso como profesionales de la salud informar a los pacientes y sus familias para poder derribar algunos mitos y calmar angustias o dudas que se presentan cuando se enfrentan a este tipo de tratamientos.